Las ventanas para una casa son sus ojos.
Una casa no es casa sino tiene sus ventanas, habitualmente en simetría de una puerta, o puede que la inexistencia de esa simetria ó paridad le insufle un toque de misterio, modernidad o simplemente escasez de espacio, en cualquier caso una edificación sin ventanas no es una casa.
Las ventanas dicen todo de la casa, de las personas que la habitan hoy , o bien de quienes la habitaron en su día. Celosas de su intimidad que protegen hasta después de haber sido abandonadas.
Sin perder su halo de misteriosa vida latente, vigilan y esperan
impertérritas, nunca duermen, hasta que el tiempo , poco a poco las
borra de la fachada y desaparecen.